Nos dimos cuenta que los materiales necesarios están al alcance de nuestra mano, solamente necesitamos buena disposición y ¡neuronas funcionando!
El grupo se dividió en dos equipos y se pusieron de acuerdo...eso ya es un logro!
Cada miembro tenía una actividad a cumplir.
En el patio podíamos ver chicos y chicas de un lado a otro buscando, preguntando, recolectando.
En la cantina consiguieron cajas, en mantenimiento una tapa de cartón grueso lo suficientemente fuerte, la historia ya estaba .....ahora ¡a trabajar!
Se dieron cuenta que faltaba un papel translúcido para colocar al teatro y volvieron a surgir las discusiones y los acuerdos. Resolvieron en grupo quiénes serían los encargados de conseguirlo.
Al otro día llegó el papel y comenzaron con la creación de los personajes.
Colocaron papel periódico sobre la mesa bajo el tilo, ordenaron zonas de pintura, de dibujo y de recorte.
¡Otra vez las discusiones!....Cuando terminaran todo debía volver a la normalidad. La mesa limpia, los pinceles, pinturas, tijeras y papeles a sus respectivos lugares.
La creatividad de los niños libres cada vez me sorprende más.
Trabajaron solos y además de obtener todo lo propuesto la mesa quedó pronta para la merienda de las maestras.
La semana entrante comenzarán las funciones!
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